sábado, 21 de septiembre de 2013

Ahí Arriba (Sexta parte).

Esta ciudad era una combinación entre modernidad y antigüedad, podías ver la típica función del mercader pero entre altísimas torres y rascacielos.

Yo iba andando entre los dos seres grises, y sentía cuchicheos y miradas de reojo a mi alrededor. Algunos me señalaban y otros me llegaban a ofrecer extraños alimentos con una pinta muy apetecible.

- Es normal que te sientas observado, es la primera vez que ven un humano en carne y hueso, hasta ahora, solo os vimos desde esa grieta.

- Pero este es un planeta muy lejano, y sin embargo puedo respirar como si estuviese en la tierra.

- Sí, ese es un factor que estamos investigando. Aspectos como la gravedad, el nivel de oxígeno, intrigante ¿verdad?

Como siempre, estaba lleno de preguntas, creo que siempre tendría algo que preguntarles.

-¿De qué animal procede la carne verde? ¿y el líquido amarillo de las botellas?

- La carne es de un animal cuadrúpedo llamado ''vleergo'', toda su carne, por dentro y por fuera es de ese color verde tan vivo, dudo que su carne sea apta para el consumo del terrícola, pero al tener la misma atmósfera y nivel de oxígeno en la tierra sobreviviría, ¿te gustaría verlo?

- ¿Así de fácil? ¿lo pido y lo tengo? sois increíbles.

- Es bueno oir halagos de alguien de otra dimensión.

Nos alejamos de la ciudad por aproximadamente un par de kilómetros. La granja. Una granja al estilo terrícola regentada por seres grises desnudos.

Oí un mugido idéntico al de una vaca y vi al famoso vleergo.

Una mezcla entre un búfalo y una vaca, totalmente cubierto de musgo, con unos cuernos echados hacia atrás. Eso es este animal.

- Carne con... hierba -dije alucinado-

- Un vleergo contiene vegetales y carne en un mismo animal, es muy completo.

Esta gente podría vivir sólo de este animal.

- Te diremos de dónde sacamos el líquido amarillo - dijo señalando una arboleda a escasos metros de la granja de verdes rumiantes -.

Un grupo de 6 de estos seres recolectaban pausadamente de unos árboles de hojas rojas y tallo estrecho frutas redondas de aspecto gomoso y de un tono similar al limón. Realizaban esta tarea con unas pinzas afiladas.

- Ésta fruta se llama ''Aninka'', se puede comer directamente del árbol y también se exprime, lo que viste en ese puesto era zumo de aninka.

- ¿Lo puedo probar? ¿lo admitirá mi organismo?

- Es mejor no arriesgarse, de todas maneras, te diré que tiene un sabor muy dulce y que es ciertamente adictiva si la tomas a todas horas.

Estoy experimentando una visita guiada por la ciudad y los alrededores de Bohna, Esta gente es tan agradable que solo me basta con preguntar, nunca se cansan de oir mis preguntas y dilemas, ellos siempre responden sin titubeos. He notado ciertas miradas de curiosidad, pero nunca con hostilidad, puedo decir que me siento cómodo aquí.

Miré al cielo y vi como el potente sol anaranjado sobre Bohna se iba poniendo poco a poco. Casi sin darme cuenta, había pasado el día entero rodeado de esta fascinante cultura.

- En breve se hará de noche, y tendrás la posibilidad de ver Bohna de otra manera - me dijo mi acompañante -

La luz se reflejaba en los edificios azules y estos daban brillos turquesa. El día había acabado.