lunes, 3 de junio de 2013

Ahí arriba (Cuarta parte).

Se abrían ante mí cientos de posibilidades, mi cabeza bullía de preguntas.

- ¿Hablais mi idioma?

- No. Estoy hablando en el idioma de mi gente, pero tu cerebro interpreta mis palabras y las traduce instántaneamente. Sin lo que te he hecho, cuando hablase, sólo oirías siseos y chasquidos.

Básicamente esta criatura había instalado en mi cerebro un diccionario de su idioma, no me había enseñado a hablarlo, directamente había inyectado todo el conocimiento linguístico de golpe.

- Tengo tantas preguntas que haceros...

- Imagino que lo querrás saber todo sobre nosotros. Haremos un trato, humano. Contaré lo que desees saber sobre nuestro pueblo con la condición de tú nos hables de el tuyo.

Yo les hablaba de nosotros y ellos hablarían de lo suyo. Era un trato justo.

Nos pusimos a andar esos dos seres grises y yo por la calle. Les conté todo lo que recordaba de las clases de historia en el instituto. Les hablé de la prehistoria, de la edad media, de los romanos, todo tipo de épocas y períodos históricos.

- Oh, entonces... ¿no siempre este sitio ha sido así? tanto espacio ocupado, así que una vez hubo sitio libre aquí... interesante - Dijo uno de ellos con interés -

Les hablé entonces de las guerras a lo largo de la historia.

- Guerra... ¿acaso sois un pueblo violento? hasta ahora creía que no, pues todos huyeron al vernos.

- Sí, durante mucho tiempo los humanos nos hemos peleado, hemos estado en disputas constantemente.

- Perdóname, humano, pero sois entonces gente estúpida, pelearse no os lleva a nada. Según lo que me has contado, estais en constante conflicto los unos con los otros. Eso os conducirá a la ruina.

Me entró un escalofrío.

- Nuestro planeta nunca ha sido invadido por ninguna otra raza, ya que de igual modo nosotros no hemos invadido nunca ningún otro planeta. Somos una especie pacífica, nuestro único afán es saciar nuestra curiosidad. Exploramos otros planetas y dimensiones en busca de nueva fauna y flora.

- ¿Y lo hacéis abriendo grietas en el espacio, como habéis hecho ahora?

- Exacto, no usamos naves que dejen huella en los sitios que visitamos, no queremos marcar el territorio.

- Pues no lo parece -dije señalando la grieta, de la cual todavía bajaban unos pocos de estos seres-

- No te preocupes, cuando hayamos completado la fase de exploración nos iremos y cerraremos la grieta como si no hubiese pasado nada.

- ¿Fase de exploración? ¿hay más fases?

- Sí. La fase de interacción con los nativos. Una suerte que hayas sido tú el que ha dado el primer paso, todos los demás huían despavoridos. Necesitamos conoceros, ya nos has hablado un poco de vuestra historia, ahora ¿por qué no ampliar un poco? Te llevaremos a nuestro planeta a cambio.

- Acepto, dije con decisión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario